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arturomoya

Destellos de lucidez...

Solo un día...

“Si un Samurai piensa lo que simplemente tiene que hacer en el día de hoy; podrá hacer cualquier cosa. Después de todo sólo se trata de un día, lo podrá soportar. Mañana también es solo un día.”


[Book of the Samurai]


[Pensamiento dedicado a mi Mulan]

[Escape]...

 

"One of the best disguised escapes from anxiety is the escape into information."

Hugh Mackay

 

Ouch!

Yep! las guerras del futuro serán en la red...

Yep! las guerras del futuro serán en la red...

Cada día estoy mas convencido de que las guerras del futuro serán en la red.

El concepto no es nada nuevo. Alvin Tofler y su mujer ya anticiparon -a su manera- algo de ese escenario en un libro memorable, allá por los noventa.

Por obvias razones, no mencionaré nombres.. pero quienes (por simple interés domésticos o complejos intereses académicos) venimos siguiendo la evolución de sitios rusos, chinos, algunos coreanos, entre otros... que ofrecen contenidos a discreción basados en una mecánica simple: motor de blogging + archivos para descarga masiva en discos duros virtuales (estilo rapidshare), hemos visto en las ultimas dos semanas una de las primeras batallas.

Dos dominios ampliamente reconocidos en ciertos círculos, fueron literalmente "barridos del mapa" de Internet: dominios, IPs, servers, contenidos en los servers... una catástrofe, no solamente para los mentores de los sites, sino también para su comunidad de miles y miles de usuarios.de todos los orígenes y lenguas. "Now there are no forecasts, there are no assumptions, there is no distinct plan of action." decían hace unos días, bajo la opresiva realidad de la extinción.

But.. "yep!"

La Resurrección está cerca... Los grupos ahora migran hacia lugares mas seguros en la Red, para ese tipo de actividades: China. Ellos mismos lo admiten.

No me consta que los sitios de referencia (a los que no mencionaré) formaran parte de los negocios de la RBN, a pesar de que algunos usuarios lo advierten públicamente en sus blogs. Quiero creer que tanta energía puesta en mantener ese tipo de sites obedece a razones de diversa índoles y algunas de ellas no exentas de cierta intención noble. Pero lo real es que la Internet -como el mundo real- está dejando de ser mas segura. Y si lo que haces, no gusta a las personas incorrectas, ten por seguro que tendrás problemas. No importa cuán inteligente o poderoso puedas ser,

"Puede que a ti no te interese la guerra, pero a la guerra le interesas tú". [León Trostsky, citado por Alvin y Heidy Tofler en su libro "Las Guerras del Futuro"].

Twister porteño...

Fue noticia.

Coincido plenamente con los comentarios de la mayoría de los usuarios, mas allá de que suenen demasiado apocalípticos... ¿Tornados en el Rio de la Plata?. Si, y por dos.
Chiquitos, pero rendidores. Estuvieron a 400 metros de la costa, y se desarmaron.

¿Algo excepcional?. No lo se, no soy experto en clima.. pero vengo asombrándome -como muchos- por las inequívocas señales de cambio climático.

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Si todavía no viste La verdad incómoda , tratá de hacerlo, para empezar a entender algunas cosas.
No hay mucho tiempo, parece. 

Free Burma ! [International Bloggers' Day for Burma on the 4th of October]


Free Burma!

Será porque, como argentino, ninguna dictadura me es ajena... yo también me suscribo al FREE BURMA .

[Visto primero en DosDedos y JLori . Gracias por espabilarme!]

El tiempo sin tiempo...

Para mantener un blog, dicen.. se necesita tiempo.

Ordenar las ideas. Escribir una entrada. Responder comentarios. Son tareas aparentemente simples, pero que requieren tiempo. No solamente Cronos, el tiempo cronológico, sino también un Tiempo Mental. Una especie de Kairós, de tiempo propicio para que prospere el post y el blog ofrezca una señal inconfundible de vitalidad.

Este blog -tal vez como su autor-  muere de a ratos, y vuelve a la vida. Se silencia... apenas respira. Tose, se sacude, y dice.. "estoy bien, estoy bien". Todavía tengo cosas para decir.

No aprendimos nada...

No aprendimos nada...

Ya está hecho.

Norcorea parece ignorar el "efecto mariposa ". Y yo, a mis cuarenta y tantos, empiezo a revivir las peores pesadillas de mi infancia: Gog y Magog, se levantan una vez más.

 

 

Ouch!... [Frascara dixit]

Nobleza "ombliga".

Ven por aquí...  

Tres hombres...

Reza un antiguo dicho japonés:

"Tres hombres viven en uno mismo: el que todos conocen, el que pocos conocen y creemos ser... y el que ni siquiera uno reconocería como sí mismo". 

 

 

11-S: ¿cuál de los dos?

El carácter tan "público" del 11 de setiembre (11-S, ya para la Historia), siempre me trae a la cabeza la idea del gran poder de los medios para instalar un suceso sobre otro, una tragedia sobre otra, volviendo al olvido -casi nunca inocentemente- otras tragedias pasadas casi como si no hubieran existido. 

Todos resolvemos la ecuación "11 de setiembre * [Bin Laden + Al Qaeda] + [New York - WTC]", pero pocos recuerdan -por la misma fecha- el golpe de Estado en Chile, ocurrido el 11 de setiembre de 1973 y que inauguró una época de dictaduras asesinas en Latinoamérica. Esta otra tragedia, es parte de nuestra propia historia argentina también. Hubo argentinos desaparecidos en Chile , tanto como chilenos secuestrados y asesinados en Argentina . Incluso, tantos periodistas, estudiantes, y gráficos, que fueron victimados y no merecen el olvido. La cordillera no fue frontera para el Plan Cóndor, orquestado a escala continental -se asegura- desde los mismos Estados Unidos. Después se supo darle a esto, el nombre de Terrorismo de Estado. El peor de los terrorismos posibles.

En el 2001, con los atentados del 11-S la Nueva Roma fue conmovida, y el mundo con ella.  Yo mismo, jamás olvidaré las tremendas imágenes de gente (gente concreta) arrojándose al vacío, "en vivo y en directo" por la CNN.

El mundo no será el mismo, dicen.
Yo  tampoco soy igual a aquel que  mirando y con el corazón agotado decía.. "no puede estar pasando". 

Tragedias. De eso se trata, parece. Convivir con la memoria de tragedias que se pisan y tratan de olvidarse, acaso para hacer un poco más vivible el presente y el futuro. Pequeñas tragedias personales, grandes tragedias colectivas. Holocaustos...

Si hay que recordar, aunque me fragiliza un poco más el alma, prefiero recordar todas las tragedias. Y no solo aquella que la televisión se empeña en refregarme.

 

 

El último cabezazo de Zidane... o como la furia siempre empaña todo.





Es la imagen más fuerte que me quedó del Mundial. Más aún que la eliminación de la Selección Argentina.

Para Zinedine Zidane, era su partido de retirada. Podría haber sido un glorioso final, pero se convirtió en otra cosa.

Una ofensa que no pudo procesar , furia y un golpe al más puro y sucio estilo callejero , le valieron la expulsión de la Final de la Copa del Mundo a manos del argentino Elizondo.

 

Y me quedo pensando, más allá de la anécdota... ¿cuán preparado está uno, cada uno de nosotros, para enfrentar su propia furia? Para controlarla, para adormecerla o educarla... para impedir que aflore con toda la irracionalidad y empañe toda una vida de logros (grandes o pequeños).

En definitiva, pienso... a Zidane le salió bien.
Comentábamos en casa, a minutos del cabezazo, lo peligroso que son esos golpes. Más cuando el cuerpo cansado y el corazón sobreexigido recibe un impacto de ese tipo. Al menos yo, sigo pensando, que el golpe podría haber tenido otras consecuencias.

Pero pensaba también, en las furias cotidianas que empiezan por un bocinazo, por un trámite que se demora, por un vendedor poco amable o un mozo desatento. Cuántos gestos de furia cotidiana, irracional, que pueden cambiar la vida (propia o la de otros) en un solo instante.

Por mi parte, sigo pensando en seguir domando la fiera de la furia.
No vaya a ser que un día, también se suba a mi cabeza.

 

La alegría -como la euforia- se comparten, pero la tristeza... se vive en solitario.

Estamos fuera de la Copa del Mundo.

Quienes me conocen bien, saben que no soy particularmente afecto al mundo futbolístico, pero este Mundial -por diversas situaciones- me ha mantenido más enchufado que de costumbre a los partidos, y en particular a la Selección. Por eso, me sumo a la tristeza general que se huele aún en las desiertas calles de mi barrio.

No voy a hacer aquí ningún comentario sobre los por qué, cómo ni quién. Yo mismo no soy quién (ni sé lo suficiente del tema) como para opinar o hacer juicios sobre los jugadores o la dirección técnica de esta Selección. Aunque acaso si me gustaría opinar sobre la intervención del azar (léase "orto"), en la resolución de los eventos futboleros.

Hoy, con un especial mirada, me he detenido en las tribunas argentinas en Alemania. Silentes, con la mirada ausente. Ojos peléandole un partido individual a las lágrimas. Estamos fuera de la Copa del Mundo.

Y allí, vino la iluminación. El entendimiento de que -en definitiva, y no se interprete como magro consuelo-, se aprende más de la tristeza que de la alegría. La alegría (o para ser más preciso, como indicaba un comentario periodístico hace pocos días), la euforia, que acompañó los últimos partidos de la selección fueron poderosos sentimientos colectivos.

Mucha gente salía espontáneamente a las calles, se abrazaban, cantaban juntos. El festejo comenzaba -precisamente- en las ahora silentes tribunas de Alemania. Esas caras festivas, los saltos, los gritos... si hasta nos daba envidia estar tan lejos, y no sentados en ese "tablón".

Pero hoy, nos tocó perder. Estamos fuera de la Copa del Mundo.

Las personas -sentadas o paradas- en las tribunas de Berlín, estaban silenciosas. Nadie hablaba con nadie. Casi nadie abrazaba a nadie. Las miradas -inviduales, aisladas- se hundían hacia adentro con una profundidad que no trae la alegría, y muchos menos la euforia.

¿Y eso por qué?
Porque la tristeza no se comparte. Porque el "dolor moral" -lejos de unirnos a otros- nos separa, nos shockea, y nos da la imagen exacta de nuestra propia vivencia en soledad. Aunque el dolor sea el mismo, aunque la tristeza sea por el mismo motivo.

Fue un destello de lucidez, que mereció escribirlo en palabras.

Ahora, las palabras se agotaron. Y la lucidez, otra vez, se fue.

 

 

Los post que no se escriben...

Acabo de tener la clara percepción de que, tan importante como los post que se escriben, son los que no...
Esos artículos mentales, esos pequeños registros que aparecen claros en la mente, como si uno los viera ya publicados.
Una especie de pequeño relato que suena -sordo- solo en la cabeza de uno.
Disparado generalmente por algo. Algo que se vio, escuchó, leyó... pero no hay tiempo de escribirlo.
El post que no se escribe en el momento, rara vez se escribe después.

Este blog, si tuviera todos los post que cruzan mi mente errática... tendría diez o veinte veces más volumen.

Hoy sé que soy un blog andante. Un weblog que respira.
PROTOBLOG acaso... apenas da cuenta de los residuos que mi mente transpira.
Por suerte.